(Miguel Jiménez).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) celebra que la recuperación de la economía española haya tomado cuerpo. Al término de la misión que prepara el informe anual sobre España, ha ofrecido las líneas principales de sus conclusiones.
Eleva su previsión de crecimiento del producto interior bruto (PIB) al 3,1% para este año y al 2,5% para el próximo, con lo que se sitúa por encima de las previsiones oficiales del Gobierno, que lo fijan en el
2,9%, tras varias revisiones al alza. Pero el Fondo cree que no es momento de cantar victoria sino de dar otra vuelta de tuerca a las reformas. Y saca su catálogo más duro: abaratar el despido, subir el IVA y el copago sanitario están entre sus recetas. La declaración de este lunes es un paso intermedio en la preparación de un amplio informe sobre España. El Artículo IV de los estatutos del FMI establece que se haga una revisión anual de la economía de los países miembros del Fondo que consiste en una evaluación económica general en la que el personal del organismo analiza las fortalezas y debilidades de cada país, actualiza sus previsiones y propone reformas económicas. El personal del FMI publica una declaración de conclusiones generales al terminar la misión en la que recogen datos y se entrevistan con responsables empresariales y políticos. Unas semanas más tarde someten el informe al Consejo del Fondo Monetario Internacional y lo publican íntegro.
Reforma laboral
El FMI y la Comisión Europea llevan tiempo reclamando a España una nueva vuelta de tuerca a la reforma laboral. Entre las medidas que propone el FMI están el contrato único para trabajadores fijos y temporales, que cita a modo de ejemplo. "El coste de despedir a un trabajador fijo sigue siendo muy superior al de uno temporal, y esta brecha debe cerrarse. Esto también podría lograrse, por ejemplo, mediante la introducción de un contrato único con indemnización en función de la antigüedad en los sectores no estacionales. Despidos más baratos y también más fáciles ayudarían a aumentar la contratación indefinida, según el Fondo: "La reducción de las incertidumbres legales y administrativas en los despidos colectivos y la racionalización de la aplicación de los criterios objetivos de despidos procedentes también ayudarían a impulsar la contratación indefinida", señala su declaración.
El FMI también pide unas políticas activas de empleo más eficientes y que sean vigiladas y evaluadas de cerca y que sean más transparentes. Este es un área en que se han producido numerosos escándalos por parte de empresarios y sindicatos. La declaración alaba la mayor flexibilidad salarial que ha permitido rebajas de sueldos desde la reforma laboral. Esa flexibilidad debe utilizarse "para impulsar el empleo en tiempos de bonanza y protegerlo en los malos tiempos". A medio plazo, "mantener el crecimiento salarial en línea con la productividad y la competitividad exterior es clave para sostener la creación de empleo", añade.
Además, el Fondo considera que la evolución salarial aún no refleja adecuadamente las diferencias de condiciones entre empresas que van bien o mal. Sus expertos creen que deben eliminarse las barreras a la negociación de convenios dentro de las empresas que se desmarquen de convenios de ámbito superior y que eso animará a los trabajadores y los capitales a ir a los sectores más productivos, lo que impulsará el crecimiento.
Reforma empresarial
El FMI considera necesario que las empresas ganen tamaño. "Eliminar los obstáculos para que las pymes crezcan es crítico", señala su declaración. "Las empresas españolas tienden a ser más pequeñas, menos productivas y menos orientadas a la exportación que las europeas", añade.
Por eso, recomienda medidas que impulsen la competencia, como la implantación de la ley de Unidad de Mercado, la tantas veces postergada reforma de los servicios profesionales, la eliminación de obstáculos fiscales y regulatorios al crecimiento de tamaño de las empresas y el apoyo a la exportación. El FMI cree que también sería bueno que las empresas deben utilizar con más asiduidad fórmulas de financiación no bancaria, incluyendo el acceso a emisiones de bonos, mercados alternativos, capital riesgo y similares.
Bancos fuertes y menos deuda privada
El Fondo cree que los bancos están en mejor estado y que eso puede ayudar a la recuperación del crédito. No obstante, anima a seguir limpiando la morosidad y reforzando el capital de máxima calidad. La declaración alaba la nueva normativa sobre segunda oportunidad de los acreedores, que cree que puede ayudar a luchar contra la economía sumergida y que tendrá poco impacto en las cuentas de los bancos. Además, el Fondo pide que Hacienda y la Seguridad Social se impliquen en los convenios de acreedores de los concursos, con quitas y esperas similares.
También incluye de nuevo es su receta la necesidad de reducir la deuda pública. "Una continua, coordinada y creíble consolidación fiscal ayudará a proteger la confianza y reducir la vulnerabilidad en potenciales shocks adversos. España ha continuado reduciendo su déficit fiscal según se iba recuperando su economía, pero el nivel de deuda pública es muy alto y sigue aumentando", recuerda el FMI. Pide que se aproveche cualquier oportunidad posible (cita, por ejemplo, una caída de los intereses de la deuda) para tomar la senda de la bajada de la deuda.
Más IVA y menos gasto sanitario
Entre las recetas más concretas que ofrece el Fondo están las subidas de impuestos y la reducción del gasto social. Recomienda "el aumento de los impuestos especiales y gravámenes ambientales", así como eliminar "gradualmente" el IVA reducido que se cobra en determinados productos básicos. A nivel regional, apunta, "los ahorros fiscales adicionales se podrían generar, por ejemplo, mediante la reducción de los costes de la prestación de servicios de salud y educación públicas y, según lo recomendado por el Comité de Expertos de Reforma Tributaria del año pasado, mediante el aumento de la responsabilidad regiones con el copago de esos servicios".
El FMI apoya así la recomendación que los expertos fiscales hicieron en marzo de 2014, cuando El comité de expertos propone al Gobierno ampliar la capacidad de las autonomías para ampliar el copago en los servicios públicos con vistas a reforzar su nivel de recaudación. A cambio de ceder capacidad normativa para imponer impuestos propios, las comunidades ganarían margen para "establecer sistemas de copago sobre los servicios públicos tales como la sanidad y la educación, mejorándose así sus capacidades de financiación de tales servicios".
El FMI también ofrece algunos consejos más sobre la financiación de las comunidades. Para empezar, exige que se sigan "mejorando los controles y el cumplimiento de las metas fiscales regionales". También, apunta, "podría considerarse la posibilidad de introducir mecanismos basados en impuestos alternativos para ayudar a las finanzas de las regiones de finanzas en los tiempos difíciles". Pide revisar el sistema de financiación autonómica y el sistema de incentivos para las comunidades que sí cumplen sus objetivos.
FUENTE: EL PAÍS